Instrucciones:
Lava los calabacines y rállalos. Colócalos en un colador, añade una pizca de sal y deja reposar durante 10 minutos para que suelten el exceso de agua. Luego, presiona con las manos o con un paño limpio para eliminar el líquido restante.
Pica finamente la cebolla y el ajo.
En un bol grande, mezcla el calabacín rallado, la cebolla, el ajo, los huevos batidos, el queso rallado y la maicena. Salpimienta al gusto y mezcla bien hasta obtener una masa homogénea.
Calienta una sartén con aceite de oliva a fuego medio.
Con una cuchara, toma porciones de la mezcla y colócalas en la sartén, aplastándolas ligeramente para darles forma de tortillita.
Fríe durante 2-3 minutos por cada lado o hasta que estén doradas y crujientes.
Retira las tortillitas y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Sirve calientes, acompañadas de tu salsa favorita, como una salsa de yogur o una mayonesa ligera.
